Bueno dado que los vuelos son bastante caros y lo mismo los
hoteles fui con la idea de al menos estar un día completo para visitar aquello.
En principio iba yo sola, pero mi madre se ofreció encantada
a venir conmigo ya que lleva tiempo queriendo visitar esa ciudad.
En cuanto a los vuelos la mayoría son con escalas de unas
7/15h pero gracias a dios encontré uno directo con la compañía Czech Airlines
por 185€, una pasada pero bueno es lo que hay.
Los hoteles también son bastante caros ya que a todo lo turístico
es lo que tiene. Nos alojamos en una pensión muy cerca del centro en la línea
roja al lado de la parada I.P.Pavlova, se llama pensión Brenzina y la verdad
que estaba genial, la habitación amplia, todo limpio y además muy seguro ya que
la entrada tanto al edificio como a la instancia era a través de una tarjeta
magnética. Lo único que no incluye desayuno pero bueno debajo hay un bar y no
esta mal.
Nada más llegar y dejar las maletas bajamos a visitar la
zona de la plaza de la cuidad vieja que esta a 3 paradas de metro del hotel. El
metro es barato hay dos tipos de billetes los de 30min y los de 90min, con
ellos puedes montar en cualquier transporte de la ciudad durante ese tiempo y
cuestan 1/1,5€ respectivamente. Además no hay mucha seguridad ni nada de eso
así que realmente puedes colarte si quieres XD
La zona de la plaza es increíble, mires donde mires hay
algún monumento o edificio precioso, además la iluminación nocturna esta muy
currada y hace que todo parezca mas estupendo. Alli puedes ver el reloj astronómico,
el ayuntamiento, la iglesia de Tyn y el palacio Kynsky.
Hacia algo de frio, creo que unos 8 grados, pero la verdad
que había miles de terrazas de esas con chimeneas fuera y cosas así, y al
entrar en los locales hacia mucho calor. Y bueno sin aire apenas se nota pero
si corre el aire puedes alucinar.
Después fuimos a cenar, era un poco tarde pero al ser una
ciudad tan turística todos los restaurantes están abiertos. En principio los
precios no eran caros, pero tampoco tan baratos como nos imaginábamos. Entramos
en un restaurante que hay enfrente de la torre del reloj llamado Staromestská
(igual que la estación de metro de la zona) y pedimos unas cervezas, un plato
de embutido de allí que estaba delicioso, mi madre una sopa de goulash y yo una
carne con salsa, mermelada y nata que estaba buenísima. Nos costó 18€ así que súper
barato para la zona en la que estábamos en plena plaza del ayuntamiento.
Tras cenar fuimos a ver la zona del puente de Carlos que
había oído que de noche era muy bonita, la verdad que las vistas desde la
orilla en las que ves el castillo de Praga y la iglesia de San Nicolás son muy
chulas, pero debo decir que me gusto mucho mas la vista en Budapest.
Ya fuimos a dormir y la verdad que había mucho ruido en la habitación porque la ventana daba a la calle y no paraban de pasar coches y ambulancia, además de que oía música porque el bar de abajo es un pub que parece que siempre tiene gente.
Al día siguiente bajamos a desayunar al bar de debajo del
hotel y bueno pedimos zumo y un croissant porque no tenían tortitas.
Después fuimos a la plaza de la ciudad vieja para hacer un
free tour en español. El tour fue muy completo y visitamos casi toda la ciudad
además de recibir la explicación de toda la historia de Praga que es muy
interesante.
La plaza de la ciudad vieja es un lugar muy emblemático
porque muestra la evolución del tiempo y tiene detalles como las cruces que hay
al lado del ayuntamiento que tienen mucha historia. Nos contaron mucho sobre la
polémica religiosa de la ciudad, como muchas veces habían tirado a gente por las
ventanas del ayuntamiento como rebelión, la explicación del reloj que te da
mucha información…
Tras esto visitamos la zona donde se encuentra la Universidad Carolina y el teatro estatal, que es donde Mozart compuso algunas de sus obras más famosas.
Después nos llevaron a ver la torre de la polvora que estaba
en reconstrucción y de hay el camino del Oro que llevaba hacia la plaza de
Wenceslao que es la zona de las tiendas.
Finalmente nos llevaron a visitar el barrio judío, donde
pudimos ver algunas de las mezquitas, la escultura de Kafta y parte del
cementerio judío que es muy curioso porque esta por niveles.
Luego contratamos el tour del castillo porque como no teníamos mucho más tiempo pues mejor ir a tiro hecho y que además nos explicaran todo. Este tour comenzaba cruzando el puente de Carlos. El puente tiene un montón de curiosidades que la verdad si no vas con guía ni te enteras y pasan desapercibidas.
Tras el puente llegamos al barrio de Mala Strana que es muy medieval
y allí se encontraba la iglesia de San Nicolás que según dijo el guía servía
como observatorio desde sus torres para espiar quien cruzaba el puente y las
embajadas de los alrededores.
En la cima del barrio se encontraba el castillo de Praga en cuyo interior se pueden visitar varios sitios como la catedral de San vito, la basílica de San Jorge… la verdad que es muy interesante el tipo de construcciones y la historia de cada una de ellas.
Luego regresamos por el puente para sacar fotos que durante
el tour no habíamos tenido mucho tiempo.
Para cenar decidimos acercarnos a la zona de la plaza de
Wenceslao a ver que había por allí, y cenamos en otro restaurante de allí que
parecía también con buenos precios, porque la verdad que con la excusa del
turismos algunos se pasan. Volvimos a pedir un entrante esta vez de quesos, yo pedí
el mismo plato que la noche anterior (porque no me entero) y mi madre una lasaña
que tenía una pinta estupenda. Y de allí a dormir que al día siguiente tenía la
entrevista.
La mañana siguiente llovía mucho y hacia frio, yo me fui a
hacer la entrevista donde pase 6h.
Mi madre paso la mañana visitando las sinagogas y el barrio judío,
pero me comento que no merecía la pena pagar por verlo.
Al salir de la entrevista fuimos a comer a un Mc Donalls, ya
que era bastante tarde, y de ahí a ver la zona cerca al hotel y a comprar una
cervezas para traer a Madrid.
Luego fuimos a visitar algunos de los sitios del tour para
sacer fotos, nos tomamos otro strudel y cenamos.
Yo estaba muy cansada y además hacia un frio tremendo así
que nos fuimos a dormir porque al día siguiente nos tocaba madrugar para coger
el avión de vuelta.
De camino al aeropuerto comenzó a nevar hacia 0º. Y aquí
acaba el viaje siento haber sido escueta pero como iba a hacer una entrevista
no llevaba muy preparado el viaje y estaba de los nervios.