domingo, 3 de junio de 2012

Turquía

A finales de mayo vi una ofertilla para irme de viaje a Turquía, para variar no tenía con quien ir, pero al final Iván decidió acompañarme en el viaje, y la verdad que ha estado genial.

Cogimos una oferta de la página SunWeb en la que por unos 350€ se incluía una semana de viaje, vuelos y hoteles. A parte contratamos el paquete de excursiones para no tener ni que preocuparnos por nada por 200€ más y con todas las comidas incluidas.

Estambul
Tras unas 4h de vuelo llegamos a Estambul, donde nos recogieron para llevarnos al hotel. Como llegamos muy tarde nos dieron unos bocadillos para cenar y se despidieron de nosotros hasta el día siguiente a las 8 am.

El hotel era normalito y se encontraba alejado del centro de la ciudad con lo que aunque teníamos ganas de salir un rato, en la zona estaba todo cerrado y hacia bastante fresquito.


A la mañana siguiente nuestra primera visita era el Palacio de Topkapi, aunque tenía unas expectativas formadas en la cabeza, la verdad que no era para tanto. Me gusto pero no era para nada lo que esperaba.


















Después visitamos la zona del hipódromo, el obelisco egipcio, la columna serpentina y finalmente las Cisternas que fue lo que más me gusto :) las fotos no tienen desperdicio porque estrenaba mi cámara nueva.





Después fuimos a comer, comida turca y muy escasita aunque estaba todo buenísimo excepto los postres XD. Todo el mundo me había hablado de los dulces allí, pero la verdad que durante todo el viaje tuvimos muy poca suerte con ellos.

Por la tarde nos llevaron a ver la Mezquita Azul. Me encanto porque es preciosa sobretodo su exterior, aunque el interior también es impresionante las lámparas que la recorren hacen con su luz un sitio impresionante. 


Después fuimos a hacer un recorrido en barco por el río Bósforo, y bueno debo de reconocer que Estambul tiene unas vistas increíbles desde la Riviera porque se pueden apreciar todas y cada una de sus basílicas y mezquitas (que son unas cuantas). Además claramente se puede contemplar cómo es una ciudad con mucha pasta porque no hay más que casitas a la Riviera con sus embarcaciones y hoteles lujosos XD, lo único malo del viaje en barco es que hacía muchísimo frio… que mal lo pase hasta que descubrí que la parte de abajo del barco era cubierta jajaja.


Para terminar el día nos dieron tiempo libre y nosotros decidimos comer un bocata de pescado en la Riviera, que por cierto estaba malísimooooo y lleno de espinas (no se mis padres donde lo comerían ni porque les gusto tantísimo); y visitar la Torre Calata donde también pudimos apreciar unas vistas maravillosas de toda la ciudad. En el poco rato que nos sobro antes de cenar, visitamos el mercadillo un lugar típico allí ya que tienen de todo y se eres un poquito avispado puedes sacarlo a muy buen precio, que pena que tuviéramos tantísima prisa :(








Tras la cena y antes de irnos a dormir nos fumamos una cachimba en el hotel con algunos compañeros del grupo que la verdad fueron majísimos :(


Al día siguiente y antes de abandonar Estambul visitamos la basílica de Santa Sofía. Debo de reconocer que aunque por fuera no tenga mucho encanto y se confunda con la mezquita Azul, sin duda su interior es mucho más bonito que el de esta otra y me encanto.



Ankara
Tras miles de horas de bus llegamos a Ankara una parada obligatoria para simplemente ver el museo de las civilizaciones de Anatolia. No sé si era por el cansancio o algo real pero la verdad que no merece mucho la pena visitar el museo y en general Ankara, ya que aunque es la capital de Turquía, es una ciudad muy nueva y sin historia.


Capadocia
Tras Ankara llegamos por la tarde noche a Capadocia al hotel “Llykia Lodge” que era un 4 estrellas chulísimo y con un buffet de los que ya estábamos esperando. Cenamos de todo y entre otras cosas probamos algunos de los dulces de allí que por fin estaban ricos :)


















A la mañana siguiente partimos rumbo la ciudad subterránea de “Yerald” una de las cuevas en las que en la antigüedad vivían. Me gusto muchísimo ya que es un lugar muy curioso y era genial ver como a medida que nos adentrábamos era más difícil llegar a la siguiente habitación.



Antes de ir a comer paramos en el pueblo de Ávanos, un lugar famoso por su artesanía y donde por fin pudimos probar el famoso helado turco, donde el hombre que lo sirve hace trucos y artiñuelas antes de entregarte el helado, nos reímos mucho. El pueblo tampoco tiene mucho, pero es realmente increíble ver como los artesanos fabrican los jarrones, nosotros tuvimos la suerte de ver una demostración y es increíble. Así que si quieres y te gusta la artesanía es un sitio que merece la pena, sino realmente yo pasaría por alto este luagar.


Después nos dirigimos a unos miradores en las montañas de Capadocia donde pudimos apreciar el paisaje lunar y vimos rocas con formas de camello, pingüino… y unas vistas maravillosas. Decidimos hacer un poco el cabra y trepar por ella para conseguir fotos y ver más de cerca todo aquello, me quede impresionada.




Por la tarde fuimos a visitar el museo al aire libre de Goreme un lugar que no debéis perderos si estáis por allí. A mí me gusto muchísimo ya que cuenta con varias casas en la montaña y pequeñas iglesias de piedra con muchas pinturas artísticas en sus paredes. En una forma para descubrir cómo vivían en la antigüedad y conseguir fotos estupendas.


Ya de vuelta al hotel, nos sobraba tiempo hasta la cena y a pesar de estar reventados preferimos seguir descubriendo la zona. Nos hubiera gustado tomar un bañito en la piscina, pero caía un chaparrón de narices, y además el hotel estaba a tomar vientos de todo, así que nuestra mejor opción consistía en coger un servicio gratuito de taxis al centro comercial de la zona. El viaje fui una odisea y es que los turcos no hablan demasiado inglés y no nos entienden un carajo con lo que no sabíamos a qué hora nos volvería a recoger ni nada de nada, toda una aventura pero finalmente gracias a la chica de información del centro comercial y al lenguaje de signos conseguimos enterarnos XD. El centro comercial era muy moderno completamente occidental con sus burguers, cine, kebabs, tiendas… y nosotros aprovechamos para comprar cervecitas baratas :) porque el alcohol allí es carísimo y se aprovechan un montón así que aunque fuera ahorrarnos unas perras.

A la mañana siguiente madrugamos como nunca, nos despertamos a las 5am para hacer un recorrido en globo a través de los valles lunares. Debo decir que a pesar del precio (150€) y el madrugón es algo que no deberías perderos, yo creo que sin duda fue la mejor parte del viaje. Es increíble poder observar desde las alturas la grandeza de Capadocia, creo que me quedo sin palabras para expresar todo aquello. Si alguna vez decidís montar en globo que sea allí, y si os toca el mismo conductor que yo alucinareis porque el tío se arriesgaba un montón adentrándose en los valles hasta casi tocar las rocas, era un profesional con todas las letras.





















Después de nuestra vuelta en globo, nos reunimos con el resto del grupo (a los cuales dimos mucha envidia jejeje) para visitar la zona de la chimenea de las hadas. Y si el nombre es apropiado ya que son miles de formaciones rocosas que parecen chimeneas, además de roca blanca que hace parecer que estas en la playa :)



Por la tarde además de las típicas visitas que incluyen todos los packs turísticos (alfombras, joyas…) fuimos a comer a un lugar donde nos prepararon un plato típico de allí, era una especie de carne estofada en unos jarrones que había que romper como tradición antes de poderlo comer, la verdad que estaba buenísimo.

Después de la comida, nos llevaron al pueblo de “Jerusalén”, otro sitio que merece la pena visita y como hacía muchísimo calor nos llevaron al hotel para poder descansar un poquito y bañarnos en la piscinita.




Y ya por la noche tenía una cena con espectáculo donde había barra libre :) así que para no perder costumbre empezamos a pedir bebida como si se acabara el mundo, vodka, cerveza, la bebida típica de allí que está super fuerte aggg vaya asco… y entre unas cosas y otra Ivan y yo nos hicimos los reyes de la noche ya que nos sacaron a bailar en varios de los números jajaja fue muy divertido. A las 23h ya terminaba la fiesta y como era muy complicado ir a ningún sitio desde el hotel, decidimos continuar la fiesta en una de las habitaciones con todos los jóvenes del grupo.



Konya
A la mañana siguiente nuevamente tomamos el autobús con destino a Antalya, pero de camino pararíamos en Konya para ver la Mezquita de Konya Mevlana. Los seguidores de esta orden turca eran una especie de secta que bailaban dando vueltas. La verdad que el museo y la mezquita estaban bien, pero no merece la pena visitarlo solo de paso.















Antalya
Por la noche llegamos a Antalya una de las zonas costeras del sur de Turquía. El hotel esta vez era de los más cutres, y aunque tenía 3 estrellas o 4, se nota que es una zona más turística para el verano. Nuevamente estábamos a tomar por culo del centro de la ciudad, pero al menos, en esta zona había supermercados, restaurantes y bares bastante animados, así que antes de dormir fuimos a tomar unas cervezas y visitar la playa. 


Por la mañana visitamos las cataratas de Karpuzkaldiran que dan al mar, y allí tuvimos algún percance con los turcos ya que se dedicaron a sacarnos fotos sin nuestro permiso y a mí no me hizo ninguna gracia. Después nos llevaron a ver pieles y joyas lo cual a la mayor parte nos molesto mucho, toda la mañana perdida en un polígono de mala muerte viendo pieles y joyas que no nos interesaban, esto es lo que odio de los paquetes vacacionales, me parece un abuso y por eso he decidido que a partir de ahora todos los viajes pienso hacerlos por mi cuenta.



Después del cabreo de la mayoría del grupo y una comida nefasta donde nos dieron un pescadito enano y no nos incluía ni el postre, nos acercaron a la zona centro de Antalya. La verdad que es un lugar bonito con muchas calles típicas, tiendas de imitación… pero siendo sincera hubiera preferido pasar unos días más en Estambul a visitar esta ciudad.
















La última noche decidimos cenar fuera un kebab típico, mirar que a mí no me gustan pero allí estaban buenísimos. También me dedique a gastarme el dinero en ropita XD porque la verdad que había cosas chulísimas.

Y aquí termina el viaje. La verdad que he visto lugares preciosos y no me esperaba para nada que Turquía fuera así de avanzado. Aunque es país grande creo que merece la pena hacer el viaje sin guías por vuestra cuenta y cogiendo algún vuelo interno, porque el bus es una paliza las distancias son enormes, y hay muchos lugares que incluyo mi recorrido que eran sobrantes y por supuesto hay que pasar al menos 3 días en Estambul porque tiene muchísimas cosas para visitar. Antalya seguramente sea un buen destino en verano para ir a la playa pero si no podemos pasar de ir ya que está en la otra punta.